Las mallas elásticas suelen emplear en la cocción y asado de carne a nivel profesional o a nivel aficionado. La malla se emplea para poder cocinar la carne y que al mismo tiempo mantenga su forma. Estas mallas permiten una cocción homogénea.
Son frecuentes sobre todo para rollos de carne, carne rellena y embutidos, productos crudos, cocidos, asados... pero puede ser igualmente empleado para los quesos.
Estas mallas son la alternativa al hilo o cuerda de cocina o hilo bramante que se empleaba antiguamente. Estas mallas se puede emplear tanto en la cocina doméstica como en la industrial.
Se la presentamos en una bobina blanca de 50 metros.
Modelos de malla
Las bobinas de malla sinfin se miden por su calibre, que se puede ver a simple vista por el número de cuadradados que tienen a lo largo de todo el ancho de la bobina (cuadradados de circunferencia). Según el uso que se le quiera dar, se usa un calibre u otro.
Disponible en calibre 24 R (24 cuadrados de circunferencia), 28 (28 cuadrados de circunferencia) y 32/S (32 cuadrados de circunferencia).
Todas vienen con un diámetro canuto interior de 2,5 cm.
Cómo usar la malla
Prepare su rollo o pieza de carne, busque un tubo de unos 12 o 15 cm de diámetro (por ejemplo una tubería PVC o una botella de plástico de refresco sin su base) y prepare la malla.
Introduzca primero la botella o el tubo, para posteriormente introducir la pieza de carne. Haga un nudo en el extremo por el que ha introducido la pieza.
Vaya al otro extremo y tire de la botella o tubo para sacarlo. Recorte el exceso de malla y cierre la malla. Ya puede pasar a cocinar el arrollado, por ejemplo a las brasas, al horno o en la cacerola.